Si miran al cielo entre el domingo por la noche y el lunes podrán apreciar uno de los fenómenos más bonitos del año. La lluvia de meteoritos conocida como “las lágrimas de San Lorenzo” o las “Perseidas” alcanzará su mayor intensidad durante esas noches, que es cuando la Tierra y la cola del cometa Swift Tuttle , que orbita al Sol cada 130 años, se crucen.

Según la NASA, la lluvia de meteoritos es sólo parte del torrente de elementos espaciales que desde el espacio irrumpen en la atmósfera diariamente. La mayor parte de estos elementos se incineran al penetrar la capa exterior de la Tierra y se produce el fenómeno de las estrellas fugaces.

Si el cielo lo permite y las nubes no son demasiado espesas, el mejor lugar para admirar este fenómeno será desde los suburbios de Chicago hasta la madrugada del martes. La mejor idea sacar una silla al jardíny completamente a oscuras, orientarla hacia en norte. Se podrán ver hasta 100 estrellas fugaces por hora.